Aunque el jardín no se disfruta igual en invierno que en primavera o verano, no debe olvidarse de su mantenimiento. Durante esta estación hay que realizar la poda de frutales, árboles caducos, rosales… pero no se deben podar determinados arbustos cuya floración es en primavera ya que se podría eliminar dicha floración (azaleas, camelias, rododendros…). Además no hay que olvidarse del último abonado de finales de otoño para césped con abono de liberación lenta y resto de plantas con abono granulado mineral. No olvidarse de limpiar los restos de hojas y flores secas del jardín para evitar la proliferación de hongos y atascos en desagües, piscinas… Otra tarea propia de esta estación es la plantación de los bulbos que florecen en primavera tales como tulipanes, narcisos, jacintos… Aconsejamos siempre realizar un tratamiento, en especial a los frutales, con un insecticida de aceite de invierno y fungicida cobre, en las proporciones correctas para evitar la propagación de insectos y hongos en primavera.
¿Por qué no debo olvidarme de mi jardín en invierno?